Nacional
El Sindicato de Empleados Públicos del Sena (Sindesena) confirmó la continuidad del paro nacional convocado para el 7 de octubre, a pesar de la instalación de una mesa de diálogo en Bogotá con la Dirección General de la entidad.
La decisión fue ratificada luego de una semana de asambleas informativas y manifestaciones en distintas sedes regionales del Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA), donde trabajadores y aprendices expresaron su respaldo al movimiento.
De acuerdo con Sindesena, la protesta busca visibilizar problemáticas internas que afectan tanto al personal como a los aprendices. Entre las principales exigencias se encuentran el reajuste de recursos para infraestructura y programas formativos, la actualización de metodologías educativas, la mejora en las condiciones laborales y la protección de los derechos de los empleados públicos.
El pliego de peticiones incluye once puntos que demandan también mayor transparencia en los procesos administrativos, dotación de equipos de formación actualizados y la participación efectiva del sindicato en la toma de decisiones.
Asimismo, Sindesena solicitó una reunión con el Ministerio de Hacienda para garantizar la cobertura presupuestal de sus reclamos, argumentando que la sostenibilidad del SENA depende directamente de una revisión integral de su gestión y financiamiento.
“Convocamos a toda la base sindical y a los aprendices a actuar en unidad y mantener la firmeza mientras no se resuelvan los problemas que afectan al Sena”, señaló el comunicado del sindicato, que reiteró su disposición a continuar las protestas hasta lograr compromisos concretos.
La continuidad del paro ha generado preocupación entre los beneficiarios de la institución, ya que la suspensión de actividades podría afectar la formación técnica y tecnológica, impactando la empleabilidad y los procesos productivos en varias regiones del país.
Frente a esta situación, la Dirección General del SENA anunció que las mesas de diálogo seguirán abiertas, buscando canalizar el conflicto a través de vías institucionales y evitar una paralización prolongada.
Expertos en políticas públicas advierten que la estabilidad financiera del SENA es esencial para mantener su papel como motor del desarrollo económico y social en Colombia, especialmente en la formación de jóvenes y adultos en situación de vulnerabilidad.